Distintas formas de preparar el café

Embolo o sistema francés.

Es un método sumamente sencillo, rápido y práctico. Ideal para los que gustan prepararse el café en el momento, ya que viene en varios tamaños que permiten preparar desde uno hasta doce pocillos. Para esta cafetera tradicional francesa debe utilizarse molido grueso y dejar que el mismo repose por cuatro minutos en el agua caliente. Luego el émbolo se baja lentamente, de esta forma el agua pasa a través del café molido y del filtro, hasta llevar el café que había quedado en la superficie hasta el fondo del recipiente que generalmente es de vidrio. Da como resultado un café muy sabroso, con un fino sedimento y un buen cuerpo, muy agradable al paladar.

Siga estas instrucciones:

1. Limpie con agua caliente y jabonosa el recipiente y el émbolo. Enjuague cuidadosamente con agua caliente para ir precalentando la cafetera y séquela.
2. Coloque la cafetera sobre una superficie segura antideslizante. Sujete el asa mientras retira el émbolo.
3. Añada a la cafetera dos cucharadas de café (cuchara de té) molido grueso, por cada 100 gramos de agua o ajuste la dosis a su gusto personal.
4. Vierta un poco de agua justo antes de hervir en el recipiente y deje que el café molido se hinche durante unos segundos antes de verter el resto del agua hasta 3 cm del borde. Revuelva la mezcla con una cuchara. Procure no utilizar cucharas de metal. Coloque el émbolo sobre el recipiente sin hacer presión de tal forma que quede colocada la tapa. Espere 4 minutos para asegurar una completa extracción del sabor del café.
5. Sujete firmemente el asa y ponga su pulgar sobre la tapa, baje el émbolo con cuidado manteniendo el pico alejado de usted. Si es difícil bajar el émbolo sáquelo 3 cm y vuelva a intentarlo. ¡Nunca realice excesiva fuerza!
6. Sírvalo inmediatamente.

Después de utilizar la cafetera, asegúrese de desmontar los filtros, con objeto de mantener su equipo impecablemente limpio.

Filtrado por goteo

Este popular sistema tiene diversas variantes. Desde máquinas automáticas, hasta manuales, con filtros de papel, plástico, tela o permanentes de metal. En todos el sistema es el mismo: Arriba un filtro con café y debajo un recipiente que recibe el café preparado. Se echa agua caliente sobre el café y lentamente se va filtrando hacia el recipiente que está debajo. El resultado es una taza de café de sabor muy limpio y muy sabroso. Cuando el café se prepara con filtro de papel descartable o tela, el café queda libre de sedimentos y por ende parece mucho más liviano de cuerpo. El filtro permanente de metal, le da un poco mas de cuerpo debido a que pasa un poco más de sedimento.

Cuando utilice filtros de tela recuerde que la primera vez que haga café no debe beberlo, tírelo y haga uno nuevo, de esta forma se "cura" el filtro y pierde el sabor a género (repita esta acción hasta quitar completamente el sabor a tela). Otra forma de "curar" el filtro es colocarlo en un recipiente que se pueda poner al fuego y en el cual entre el filtro cubierto con agua, colóquele café molido y hiérvalo durante unos minutos, luego enjuáguelo y ya estará listo para usar. Después de cada vez que lo utilice debe enjuagarlo bien y secarlo en un lugar aireado para que no tome sabores y olores desagradables.

El vidrio templado de las jarras de la mayoría de estas cafeteras (de método de filtrado por goteo), permite ser mantenido en calentadores. Muchas cafeteras eléctricas vienen con un calentador para mantener el café caliente. Si va a comprar una de estas cafeteras recuerde buscar una que caliente el agua a la temperatura adecuada. Asegúrese también que el calentador para mantener caliente el café tenga un dispositivo de control de temperatura para que no lo caliente durante mas de 20 minutos, asegurando así la frescura del café.

Siga las siguientes instrucciones:

1. En cafeteras automáticas: Llene el recipiente con agua fría y fresca.
   En cafeteras manuales: Llene una pava de agua y hiérvala.
2. Automática o manual: coloque el filtro de papel o permanente (de plástico o metal) en el porta filtro. Agregue la cantidad necesaria de café con el molido adecuado.
3. Automática: Prenda la cafetera. Manual: Eche el agua casi hirviendo lentamente en el centro sobre el café, deje que se hinche y luego siga agregando agua.
4. Automática o manual: Cuando todo el agua haya pasado a través del filtro mueva circularmente la jarra para que el café que destiló primero y que es más fuerte se mezcle con el que destilo al final, logrando un sabor homogéneo en todo el café.
5. Sírvalo inmediatamente.

Cafetera de presión:
también conocidas como expreso familiares o napolitanas.

Este tipo de cafeteras, que son conocidas en todo el mundo, tienen la particularidad de combinar con la temperatura del agua un factor que concentra aún más el sabor del café. Este factor es la presión, es por eso que son llamadas también expreso familiares. El funcionamiento es básicamente así: El agua contenida en el recipiente hermético inferior al calentarse sube por presión al contenedor de la parte superior. Para ello tiene que pasar por el embudo que está entre ambas partes y en la cual se encuentra alojado el café molido. Al filtrarse el agua caliente y la presión extraen el sabor del mismo, obteniéndose un café con buen cuerpo, mucho sabor y bebida clara. Es muy importante que funcione bien la válvula que tienen en la parte inferior, ya que si no llega a ser así el agua permanecerá demasiado tiempo calentándose y quemará el café.

1. Desenrosque la Parte Superior de la cafetera.
2. Retire el embudo.
3. Llene la Parte Inferior de agua hasta la altura de la válvula.
4. Coloque el embudo dentro de la parte Inferior. Coloque café en el embudo de acuerdo a las proporciones anteriormente explicadas (dos cucharadas tipo de cuchara de té por cada 100 gramos de agua).
5. Unir enroscando fuertemente la parte inferior y superior controlando que no haya granitos de café en la rosca.
6. Colocar la cafetera sobre fuego moderado, esperar pocos minutos hasta que el contenido de la parte inferior pase a la parte superior, por intermedio del conducto, debiendo retirar la cafetera del fuego cuando salga por el conducto, solamente vapor.
7. Servir el café sin cambiar de recipiente.

Estas cafeteras deben usarse café molido medio número más grueso que el común de bolsita (para filtro). Si el café es torrado, hasta un número más grueso se aconseja que el molido sea 2 en adelante. No presione jamás el café dentro del embudo. Use fuego moderado.

Cuando Ud. proceda a lavar las piezas nunca debe golpear el embudo.
No lave con esponjas o polvos limpiadores abrasivos.

Para obtener un óptimo aroma y sabor de café, recomendamos que antes de usar la cafetera por primera vez, se proceda al correcto lavado de los recipientes, si aún persistiera algún gusto extraño, es conveniente descartar el primer café que se haga. Si el uso no es periódico se recomiendo secar bien la cafetera en su totalidad y guardada con las partes superior e inferior separadas.

Cafeteras expreso y mini-expreso.
El alma del café.

Una taza de café expreso bien hecho, es una expedición al alma del café. Este sistema inventado por los italianos en el año 1903, es uno de los métodos de preparación más desarrollados en nuestro país. Estas máquinas aplican la precisa cantidad de agua caliente y presión para extraer del café toda esa energía y sabor tan gratificadores. Hoy en día se encuentra una amplia gama de cafeteras mini-expreso en las tiendas de electrodomésticos. Todas ellas tienen características similares, aunque existen pequeñas variaciones que están vinculadas con el grado de automatismo y complejidad. El sistema básicamente es así: Una caldera que contiene agua caliente, un calderín sumergido dentro de esa caldera, dentro de dicho calderín una serpentina por la cual pasa el agua de la red y una bomba que le da presión al agua para que pase a través del filtro y el café molido 1,5 que hace resistencia a la presión. El filtro es de metal y tiene unos pequeños orificios a través de los cuales pasa el agua con la esencia del café. Recuerde utilizar entre 6 y 9 gramos por pocillo.

Siga los siguientes pasos:
Antes de preparar café lea cuidadosamente
las instrucciones del manual de su máquina.

1. Llene el recipiente con agua fresca y fría.
2. Enchufe la máquina.
3. Llene el filtro con seis gramos de café. Utilice la tapa para apisonar que trae la máquina y realice presión sobre el café molido dentro del filtro hasta compactarlo, no demasiado, solo para permitir que el porta filtro calce bien en la boca de salida de agua caliente. Ajuste firmemente el porta filtro en la boca.
4. Cuando el agua está lista (generalmente hay un indicador luminoso para comprobarlo), pulse el botón que hace que salga el agua caliente.
5. Cuando la taza está prácticamente llena vuelva a presionar el botón para cerrar el paso del agua. Algunas máquinas le permiten memorizar el tiempo de preparación y se apagan automáticamente.
6. Sírvalo inmediatamente.

Para saber si un café expreso está bien hecho debemos prestar atención a las siguientes características. Debe tener una espuma color crema sobre la superficie, el color del café debajo de esta debe ser rubí, debe estar libre de sedimento y la bebida debe tener mucho cuerpo y sabor.

Uno de los factores que influye dramáticamente sobre el resultado, más que en cualquier otro método de preparación, es el molido. Para este tipo de cafeteras nosotros recomendamos molido 1,5, sin embargo, puede que existan algunas diferencias entre las diferentes marcas.

¿Cómo saber si el molido es el adecuado?
La velocidad de preparación debe oscilar entre los 20 y 30 segundos por taza. Si cae demasiado rápido y no deja esa espuma color crema y espesa es por que el molido es grueso, si por el contrario tarda mucho y la espuma es marrón oscura o negra quiere decir que le molido es fino. Si esto es así, recuerde la próxima vez pedir el molido adecuado. Claro que en Café Martínez, se lo cambiamos hasta que Usted encuentre el molido exacto sin ningún costo extra.

De todas formas existen formas de salir del paso si llega a ocurrir cualquiera de los dos problemas antes mencionados. Si el molido es grueso y el café sale demasiado rápido y sin espuma se debe apisonar el café dentro del filtro (estas máquinas suelen traer una especie de tapa que entra dentro del filtro para apisonar), de esta forma se aumenta la resistencia a la presión y se logra el efecto crema. Si el molido es muy fino, el café sale muy despacio y la espuma es oscura, se debe poner menos cantidad de café y no apisonar, tratando de aliviar la resistencia a la presión.

Este tipo de máquinas trae por lo general un dispositivo para tirar vapor. Este que generalmente es un tubo o pico de metal, sirve para calentar la leche y lograr una maravillosa espuma para un delicioso capuchino. Para lograr una buena espuma es importante que utilice leche fresca, cremosa y fría. Coloque la leche en una jarra, abra la canilla para que salga vapor, arroje un poco de vapor al aire y luego introduzca el pico que tira vapor dentro de la jarra realizando movimientos ascendentes y descendentes. Una vez que consiguió una espuma espesa y consistente retire la jarra y eche un poco de vapor al aire para limpiar la cañería, de lo contrario el remanente de leche entra por el tubo por diferencia de presión y va a la caldera ensuciando el agua. Si quiere simplemente calentar la leche y no hacer espuma eche un poco de vapor al aire, coloque el pico que tira vapor en el fondo del recipiente que contiene la leche, luego abra la canilla que acciona el vapor y déjelo en el fondo hasta que la leche este a la temperatura deseada. Recuerde utilizar leche fresca cada vez que hace un capuchino, no la recaliente. Limpie cada vez el pico por fuera con un trapo húmedo.

Un pequeño secreto:
Si quiere sorprender a alguien gratamente, prepárele un capuchino tricolor. Para ello busque una taza o jarra de vidrio transparente, templado o resistente al calor. Llénelo de leche hasta la mitad aproximadamente (o un poco menos). Prepare su maquina expreso para que salga vapor del pico. Eche un poco de vapor al aire, coloque el pico dentro de la jarra de vidrio donde va a preparar el capuchino tricolor y comience a calentar la misma realizando movimientos ascendentes y descendentes hasta lograr una buena espuma. Luego prepare la máquina para hacer un café siguiendo las indicaciones anteriores y échelo directamente sobre la leche caliente dentro de la jarra lo más en el centro posible. Usted verá como la preparación se va acomodando dentro de la jarra de manera tal que le queda debajo de todo la leche caliente, en el medio el café y por encima la espuma blanca. Corónelo con una cucharada de crema, un poco de chocolate rallado y si gusta una pizca de canela. ¡Un manjar!

Café a la Turca.

En este método de preparación uno de los puntos fundamentales es el molido. Recuerde que tiene que ser molido a la turca o "0" (cero). Recomendamos utilizar para este tipo de preparación la típica cafetera turca, que es una vasija de cobre con un mango de madera. Coloque la cantidad de agua necesaria para la cantidad de pocillos que quiera preparar, luego agregue el café (una cucharada de té colmada de café por pocillo) y revuelva apenas con una cuchara de madera. Coloque la cafetera sobre el fuego. Cuando el agua está por hervir usted va a observar que el nivel del agua aumenta y el café sube, entonces lo retira del fuego hasta que el café baje. Repita la operación dos veces más. O sea que en total el café debe subir y bajar tres veces. Luego de retirar por tercera vez la cafetera del fuego, deja reposar durante tres o cinco minutos, si quiere puede agregarle un chorrito de agua fría para ayudar a que el café vaya al fondo. Algunas personas le agregan un poco de agua de azar. El café esta listo para servir. Al hacerlo debe tener cuidado de no mover demasiado la cafetera para lograr que la borra se mantenga en la misma y no se vuelque dentro de los pocillos.

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